Os prometí nuevas aventuras, y las tengo muy presentes, pero la verdad es que entre las bodas de septiembre, que están siendo muchas, las de octubre, y los trabajos de la casa, que ya está en la recta final, no tengo tiempo para embarcarme en mas cosas. Pero todo llegará. Mientras tanto saco un ratito para contaros mi experiencia con las Dalias XXL este año.
Este ha sido el segundo año que plantamos Dalias XXL y, aunque ha sido un poco diferente al año pasado, hay varias cosas que he aprendido y que creo que os pueden interesar y venir muy bien si también queréis plantar o habéis plantado este tipo de dalias. Si tenéis alguna experiencia propia con estas flores que queráis compartir conmigo, vuestros comentarios serán mas que bienvenidos, seguro que aun tengo mucho que aprender.
¿Os acordáis la primera vez que escribí sobre ellas? Ni siquiera tenía fotos para enseñaros lo bonitas que son y en aquella ocasión, conté con la colaboración de Floret Flowers que muy amablemente me cedió sus imágenes para enseñaros como había que plantarlas. Todo lo que os conté en aquel post sobre cómo plantar Dalias “Cafe Au Lait” lo había sacado de mi colección de libros de Cultivo de Flores (recordadme que algún día os haga un listado de los mejores, que muchas me lo habéis pedido) y de blogs de aquí y de allá (bueno, mas bien de allá).
A día de hoy tengo tantas fotos bonitas y he aprendido tanto que podría reescribir ese post sólo con mi experiencia, y puede que lo haga, pero de momento os dejo con este breve listado de cosas importantes que he aprendido.
1. La fecha sí importa. Y mucho.
El año pasado planté las dalias en el mes de abril, cuando se plantan los tomates, que según mi madre es en la primera luna en cuarto creciente después de Semana Santa. Este año el mes de abril fue de un nivel de locura tal, que se me pasó por completo: las primeras bodas, un incremento en las ventas de la tienda online como nunca antes había visto, me contrataron 5 o 6 jardines de golpe y con todo, casi muero, así que las dalias quedaron olvidadas hasta mediados/finales de mayo. Las planté muy tarde, lo que significó que durante el mes de julio no tuvimos mas que un par de dalias, preciosas ellas, todo hay que decirlo, que llegaron justo a tiempo para la última boda del mes, el 30 de julio. El año anterior cortamos las primeras dalias antes de San Juán, así que os hacéis una idea del retraso.
2. Las dalias también comen.
Lo digo siempre: igual que nunca tendrías un perro y lo dejarías un mes sin comer, las plantas también necesitan alimento, sobretodo y especialmente si están en maceta. Este año he plantado dalias en 3 sitios diferentes para ver como crecían en diferentes climas y en diferentes condiciones, planté en Burgos, en Mi Granja de Flores y en mi Jardín (Mini Granja de Flores). Las de mi jardín son las que mas he alimentado, básicamente porque son las que tenía mas cerca y a las que podía dedicar mas tiempo. No hace falta que os diga lo gigantes que se han hecho. Increíbles. Una misma planta ha llegado a tener 3 dalias gigantes a la vez, de las de mas de un palmo de diámetro. Eso ni siquiera nos pasó el año pasado en Mi Granja de Flores y eso que tuvimos una cosecha muy abundante. Es mas, con muchas menos plantas, he conseguido mas flores en la minigranja de Flores que en la Granja.
Lo que utilicé yo para abonarlas fue una palada pequeña de compost en cada dalia, otra de humus de lombriz, y otra palada un poco mas generosa de estiércol de caballo. He utilizado el compost casero que hacemos nosotros, pero también podéis usar este compost. Si queréis hacer compost, utilizar unca compostadora como ésta. El humus de lombriz que utilizo es éste y el estiercol de caballo que he utilizado ha sido este .
Esta operación la hice justo el día que las planté y luego lo he hecho un par de veces cuando empezaron a asomar brotes. Ahora que están en plena floración lo voy a hacer otra vez.
3. Los caracoles no son nuestros amigos.
Y me duele en el alma porque sabéis que soy una gran defensora de todo lo natural y de respetar y afectar lo mínimo posible a nuestro entorno. Pero los caracoles son demasiado, hay demasiados y se comen las dalias y los guisantes de olor, y por ahí no paso. He utilizado este tierra de diatomeas sobretodo cuando empezaban a brotar, que es el momento mas crítico.
Cuando la planta ya está grande el daño que hacen los caracoles es menor, aunque no hay que subestimarlos y por eso:
4. Rociar, rociar y rociar.
Las dalias gigantes, no se que tendrán, pero gustan a todos los bichos vivientes. Las abejas y los abejorros (he aprendido a diferenciarlos porque no son lo mismo), se han vuelto locos este verano en mi Granja de Flores y en mi Jardín. Las abejas y los abejorros son totalmente respetuosos con las flores, vienen, hacen lo que tienen que hacer y se van, nadie nota su paso. Pero también hemos tenido visitas de arañas, y a estas me costó mas descubrirlas, porque se esconden. Y no me importaría que vinieran a vernos si no dejaran las flores totalmente mordisqueadas e inservibles. Así que una vez mas, he tenido que actuar. Para ahuyentar las arañas utilicé este insecticida triple acción ecológico. Sólo las rocío un poco cuando veo que hay fiesta de arañas y en realidad solo lo hice cuando salieron las primeras, porque ahora que hay tantas flores no me importa que dejen una o dos mordisqueadas.
5. Cada palo que aguante su vela.
Este tipo de dalia es muy poderosa. Tiene un tallo increíblemente gordo y duro pero no es suficiente para sujetar estas flores tan gigantes, por lo que necesitan un buen soporte. Lo que mejor me funciona a mí son las cañas de bambú, y para las que están cerca de la valla, las aguanto atándolas directamente a la valla con cuerdas.
6. No es oro todo lo que reluce.
Llevo dos años trabajando con el mismo proveedor. El año pasado ya os comenté que no quedé muy contenta con los colores. Pedí unos packs variados en los que los colores de la foto parecían unos y luego fueron otros que nunca habría pedido de haberlo sabido. Este año he acertado a la hora de pedir, ya que no pedí solo los packs variados, sino directamente las variedades que me interesaban. Los colores me han encantado, todos en rosa pastel muy clarito y con matices, pero me ha pasado, que yo sepa, dos veces, que de un paquete de dalias rosa pastel, han salido dalias burdeos, y además de las pequeñas. Supongo que es normal que de un pedido de 300 dalias, 2 salgan rana, pero a la persona a la que le sale no le hace ninguna gracia. Y de aquí no tengo nada que aprender, porque no depende de mí, es imposible saber que variedad es una dalia mirando solo la raíz, así que lo único que podemos hacer es tener fe ciega en que nuestro proveedor no se va a equivocar al marcar las dalias. Proveedor, si lees esto, fíjate mas al empaquetar las dalias, por favor.
A pesar de no haber podido utilizarlas en las bodas de julio como el año pasado, estoy contenta de haberlas podido utilizar en nuestra última boda de julio. En esa ocasión usamos varias dalias gigantes para decorar un arco de ceremonia, del que espero poder enseñaros fotos de los fotógrafos muy pronto, porque yo no pude hacer ninguna. La verdad es que son las flores ideales para este tipo de decoraciones porque son tan grandes que con poca cantidad de flores enseguida consigues un efecto espectacular.
Este mes de septiembre también está viniendo cargadito de bodas y ya hemos podido utilizar las dalias XXL para decorar arcos y mesas, como esta que decoramos en el Mirabé el pasado sábado.
Y esto es todo por ahora. Aun nos queda media temporada de dalias, y me queda comprobar si como el año pasado, al llegar el otoño las dalias se vuelven anaranjadas. Ya os lo iré contando, si no es por aquí, por instagram.
Como siempre, muchísimas gracias por leerme, escribirme e interesaros por mí. Nos vemos muy pronto de nuevo.
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Hola,
Algo que a mi me ha funcionado muy bien con las dalias para evitar caracoles y babosas (aunque en un clima diferente, Belgica) es plantar las dalias con otras plantas. Para evitar caracoles el cilantro funciono muy bien, para ello puse plantitas de cilantro cultivadas de semilla en la base de las dalias en todo el frente del borde. También plante estragon y funciono bien. Este anno intentare hierbas del grupo de las artemisias, que los caracoles odian. Tagetes, girasoles y calendula son también buenas compañeras de las dalias.